Lana no se amilana, la artista anteriormente conocida Elisabeth Grant nos sigue vendiendo como nadie un estereotipo, su estereotipo. En Ultraviolence, Del Rey sigue siendo la drama queen que conocimos en Born to die, reincidiendo aun mas si cabe en los clichés de languidez, tristeza y nostalgia que suelen invadir su musica.
Cierto es que si no estas muy metido en su universo de rollo autodestructivo, la propuesta de la californiana te puede resultar de lo mas plomizo y tedioso.. y viceversa, si eres de los que disfrutaron como un cerdo en el barro con su anterior album, de Ultraviolence solo necesitaras un par de escuchas para dejarte envolver por su atmosfera de película de Lynch.
Sí, pero este disco no tiene hitazos como Video Games o Born to die, dirán algunos, pues sí, no solo los tiene, West Coast, Brooklyn Baby o Florida Kilos son mayúsculas, sino que mejora algunos aspectos de su debut, como el acierto de eliminar ese tufillo de ladygagismo que irradiaba Born To Die (léase Summertime Sadness por ejemplo, carne de remix discotequero hoy dia por cierto) en lo que posiblemente haya tenido que ver el vocalista de los Black Keys, Dan Auerbach, parte partícipe de este álbum desde la producción.
Lana Del Rey te mola y lo sabes.